Permíteme hacerte una pregunta que puede sonar un poco burda. ¿Te comunicas de la misma manera con tus amigos que con tus padres? La verdad es que no, seguramente con tus papás lo haces con respeto, y con tus amigos de una manera más bromista, inclusive vulgar, y está bien, no estamos juzgando. Ahora déjame hacerte una segunda pregunta; ¿cómo hablas con tu mascota? No me refiero a que utilices voz suave como si fuera un bebé, sino a ¿cómo le das a entender lo qué está bien o mal? Sin duda alguna, es incapaz de responderte con palabras, pero sabes que te entendió cuando deja de hacer aquello por lo cual lo regañaste. 

Ahora, viene la última pregunta y la que te dejará pensando un buen momento… ¿cómo te comunicas con el universo? Detente a pensar en esa pregunta el tiempo que sea necesario.

De la misma manera que tu mascota, el universo te responde con hechos, no con palabras. Sabes que te está escuchando, pero más que nada, haciendo caso, cuando te va dando lo que deseas, o por lo menos una pequeña pista. Por ejemplo, si tu sueño es ir a Las Vegas, sabrás que el destino te escuchó cuando vas caminando y te topas el local de una agencia de viajes con una excelente promoción.

El universo escuchó tu plegaria y la atendió, pero no te va a llevar a ese lugar por arte de magia, ahora te toca a ti actuar. Es momento de tocar la puerta, entrar y adquirir esa oferta antes de que se acabe. Sin embargo, también es donde continúa la parte en la que la mayoría de nosotros nos saboteamos; el momento en el que nos llenamos de excusas: No es el momento adecuado, no tengo dinero, no tengo visa, nadie querrá acompañarme, etc. Pero quiero que te grabes esto muy bien:

Las excusas, no son otra cosa más que el miedo hablando en voz alta.

La forma de vencer una excusa es simple, ¡grita más fuerte! Es haciendo que tu deseo sea mucho más poderoso que tu temor. Cada vez que te digas no es el momento, respóndete que si se te está presentando la oportunidad, es para tomarla. ¿Qué no tienes dinero? ¿Sabes cuánto gastas al mes en cosas que no te gustan, que realmente no necesitas, qué parecen llenar un vacío? Puedes sacrificarte y dejar de gastar en cosas banales y ahorrar para el viaje de tus sueños. No tienes visa… en lugar de desilusionarte, contacta a un agente que te ayude a tramitarla, es la señal que estabas esperando. ¿Nadie querrá acompañarte? El mejor viaje de mi vida ha sido solo. 

Pero retomemos un poco el lenguaje del universo, ¿qué pasa si este no te responde? Si por más que sueñas con ese viaje, ¿no se te presenta la más mínima oportunidad? Primero hay que analizar si ese sueño es tuyo o de alguien más. Probablemente se quedó en tu mente porque tu padre siempre quiso ir y no pudo, entonces te heredó su anhelo, pero no importa que tú sí lo consigas, porque al no ser tuyo, no lo disfrutarás como él lo hubiera hecho. 

Tal vez si es tu deseo, todas las noches no puedas pensar en otra cosa… pero estás tan enfocado en que es un deseo imposible, que confundes al universo. Te escucha decir imposible y por lo tanto, hace todo lo posible para impedir que se cumpla.  

El primer paso para cumplir algo, así sea sencillo o gigantesco, es creerlo, es considerar que puedes lograrlo, porque de lo contrario, ni siquiera lo intentarás. 

Para finalizar, quiero que te quedes con una pregunta, ¿con qué energía estás pidiendo tu deseo? Porque para mí, la energía es el lenguaje del universo. Él, no escucha tus palabras, lee tus sentimientos. 

Una energía positiva te llevará a lugares extraordinarios, y por el contrario, una energía negativa, te llevará a lugares y situaciones extremadamente ordinarios. Donde no hay nada por lo cuál asombrarse, porque aunque lo hubiera, serías incapaz de notarlo. Tenemos dos ojos, y aún así, sólo podemos ver una cosa a la vez… o miras la belleza de las cosas y nutres tu alma, o amargas tu existencia al enfocarte en los defectos de este mundo. 

Así es que… ¿A donde mirarás?

Comentarios

Aún no hay comentarios. ¿Por qué no comienzas el debate?

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *